miércoles, 30 de noviembre de 2016

Ser especial

Cuando cumplí 16 años empecé a sentir la presión por primera vez de tener que enfrentarme a un mundo que parecía agresivo. Miraba a mis compañeras luchar todos los días para no comer, para que no les salga un grano, para no quedarse dormidas y seguir estudiando para ingresar a la universidad.

Nunca fui la actriz invitada en la historia de mi vida, siempre me ha gustado ser la protagonista y generar algunas novelas que me divierten. El último año de secundaria, jugué a ser la chica que entraba a la universidad sin esfuerzo, que estaba con el chico más codiciado, que empezaba una carrera en comerciales, que se llevaba todos los premios literarios, y así fue.

Eso generó que algunas chicas de mi colegio me odien hasta el día de hoy, como es posible que la vagaza de Carla Tello haya ingresado a la universidad, estudiando hasta  las 9 pm para ver la novela con sus papás y dormir a las 10. Bueno, lo que sucedió es que la vagaza, se dedicaba a prestar atención en las clases, estudiaba lo necesario en lo que sabía que era buena, lloraba de miedo en los recreos y luego se decía a si misma "voy a ingresar", se secaba las lágrimas e iba a chismear, mientras las otras estudiaban. La vagaza fue al señor de los milagros y se consiguió la estampita del divino niño, dejo la misma cerca al lápiz, borrador y carnet de postulante con una velita.

A lo largo de mi vida he perdido muchas amigas y amigos por este tipo de situaciones que mucha gente no entiende y que yo considero mágicas, mi sentido despreocupado de hablar, la poca empatía que a veces muestro a algunas personas, mi falta de compromiso en el amor, la rápidez con que termino y empiezo relaciones,  y mi irresponsabilidad no son del todo ciertas.

Lo que sucede es que aprendí a no preocuparme por mucha gente, aprendí que los amigos pueden ser pasajeros, vienen y van, (a los que se quedaron les agradezco eternamente su amistad), Aprendí que no vivo de los demás, que si algún día voy a estar en la comidilla, en el ojo de la tormenta esta bien, porque total ya pasará. Que si me quedo pensando en el qué dirán no voy a hacer nada. Y que no tengo que hacer nada para demostrarme algo a mi misma, mientras esté feliz todo está bien.

Dentro de todo me da gusto que se preocupen en hablar de mi, en decir solo cosas malas, es bueno que digan que eres de lo peorcito, porque solo los pensantes se acercan a ver si es verdad. La mentira más loca que escuche de mi fue que me case hace un par de años con un narcotraficante, al ser capturado por la policía, me deja a mi parte de su fortuna, y por eso tengo los viajes, el carro, los diplomas, maestría en Nueva York, etc. Cuando la verdad es que saliendo del trabajo si es que no tengo vida social, me gusta ver televisión con mi viejo y comer chocolates.

2 comentarios:

  1. Guuuau me describiste eres de las personas q hacen las cosas xq sienten q asi esta bien mientras estes feliz tranquilo y no jo.. A los demás pues pa lante.. No se pero me gusta tmbien la tranquilidad de mi hogar .. El salur y trasnochar y vivir resaca yo no es li mio... Vivo para mi y mis hijos y aun q no viva con ellos trato en lo posible de q sientan mi presencia. Pero bno sobre ti me encantaa eres una mujer única. Nuevamnt Felicitaciones y te deseo lo mejor 💋s

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